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Te invito a que busques orgasmo en internet. Podrás comprobar como prácticamente se habla en exclusiva del orgasmo femenino, ilustrándolo con una amplia gama de “instrucciones”. Desde trucos infalibles, hasta técnicas ancestrales para alcanzarlo. Cómo lo expresan las mujeres, e incluso cómo saber si están fingiendo.

¡Parece difícil, muy muy difícil alcanzarlo, pero se puede conseguir, solo hay que seguir las instrucciones! En fin.

¿Y el orgasmo masculino? Ya sabes, pim, pam. Mucho más rápido, sin complicaciones, sin preocupaciones. Algo sencillísimo, que se tiene y ya, ¿no? Pues la verdad es que no. Así que hoy va por él.

Cuando tienes un orgasmo, parece improbable que puedas tener otro enseguida, porque necesitas tu tiempo pare recuperarte. Digo parece, porque no es así. Si bien es cierto que existe un tiempo de “recuperación”, el llamado período refractario, aparte de que varía mucho entre unos y otros, este solo aparece tras la eyaculación. Vamos lo que se conoce como “correrse”, pero no tras el orgasmo. ¿Y no es lo mismo?

No, es cierto que suelen darse con prácticamente segundos de diferencia, y quizá esto sea lo que te pueda hacer pensar que sea lo mismo. Pero se trata de dos procesos bien distintos.

Así, muy resumidito, te cuento. Existen dos subfases dentro de la fase orgásmica del hombre, la orgásmica y la eyaculatoria. Ambas respuestas se desencadenan de manera automática por el SNA (Sistema nervioso autónomo) cuando existe una estimulación genital, así, por norma general. Los nervios sensitivos, envían el gustito a tu cerebro, activando a su vez los nervios simpáticos.

Estos últimos, son los responsables de desencadenar en todo tu cuerpo la sensación de orgasmo. ¿Cómo? Mediante la liberación de sustancias químicas que provocan cambios fisiológicos. Entre ellos el incremento del ritmo cardíaco, la sensación de placer, y contracciones musculares, junto al esperado y famoso reflejo eyaculatorio.

Si controlas y entrenas este reflejo a tu antojo, con la ayuda de diversas técnicas puedes tener lo que se conoce como un orgasmo seco. Además, si ya has eyaculado previamente y mantienes la erección tienes más facilidad de conseguirlo.

¿Esto quiere decir que podría tener varios orgasmos seguidos? Efectivamente. Así, todas las veces que quieras, puedas, surja, o estés dispuesto a intentarlo.
Es importante tener en cuenta que no estamos hablando de un trastorno por imposibilidad eyaculatoria, ya que esto hace referencia a la incapacidad de eyacular bajo ninguna circunstancia. No, te hago referencia a la capacidad de control sobre tu propio cuerpo.

Palabra de Kinsey: “Los hombres que llegan al orgasmo sin eyacular tienen el potencial de alcanzar clímax de forma ininterrumpida”.

Así que cuando tengas un orgasmo no tienes por qué parar tu relación sexual, no es el fin. Te planteo una de las posibilidades que existen, no tiene porque pasar, y si pasa quizá sea cuando menos te lo esperes. No te frustres ni te obsesiones con ello. Nunca dejamos de conocernos.

Tú prueba, sin presiones, siempre bajo el respeto, y el mutuo acuerdo.
Y oye, a ver qué pasa.

Un beso!!

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