¿Cómo lavarme? La higiene íntima también es cosa hombres

Hace unos días os hablaba de la higiene íntima femenina. Hoy os toca a vosotros, a los hombres. Y si bien la higiene íntima en las mujeres es importante como os mencionaba en el artículo una vagina lista y aseada, la higiene genital en los hombres no merece de un segundo plano.

Una de las cosas que no se suele prestar atención, restando asimismo importancia y que se realiza de manera automática, es la higiene genital masculina.

«Me paso un poquito de agua y jabón por la zona del pene y testículos, y vualá! listo! Limpieza hecha.» Y no, la verdad, la limpieza de tu pene necesita de tu atención y cuidado; requiere de una buena higiene diaria.

Pero, ¿Cómo lavarme y mantener una buena higiene íntima? Te preguntarás.

* Para empezar, una buena higiene te evitará de cualquier tipo de infección, bacterias, hongos o enfermedad. Lávate desde pequeño manteniendo una higiene genital diaria.

* Las fuertes olores en la zona genital son señal de una infección. En el caso de que se manifiesten, puedes notar sensación de quemazón o ardor, hinchazón, enrojecimiento del pene e incluso secreción de líquido purulento cargado de pus.

* Lávate a diario y con abundante agua. Presta mucha atención a la zona del glande y retira el prepucio hacia atrás cada vez que te laves en el caso de no tener la circuncisión hecha. Piensa que de no hacerlo, se acumulan en torno a la base del glande los aceites cutáneos y células muertas de la piel y se convierten en una sustancia blanca con una olor muy fuerte, con aspecto de queso o yogur, que indica falta de higiene.

* El jabón, cuanto más neutro mejor. Trata de no frotarte muy fuerte, es una zona muy sensible y puedes irritar la zona fácilmente. Observa que no quede nada de jabón antes de secarte.

* Al acabar tus relaciones sexuales, hayas o no utilizado preservativo, lávate de manera inmediata. Hay mayor formación de bacterias.

* Utiliza una toalla distinta a la que secas el resto de tu cuerpo. Además, si eres propenso a sudar, aplícate polvos de talco cada vez que te laves.

* Lávate el ano y las inglés. Son zonas muy delicadas y cercanas al pene y testículos que también requieren de una higiene diaria.

* Utiliza ropa no muy ajustada. Ya no solo por la olor que ésta ocasiona, sino por la temperatura  que necesitan tener los testículos.

Una buena higiene íntima diaria es uno de los comportamientos más saludables para evitar posibles infecciones o enfermedades a largo plazo.

Escrito por Noemi González-Bellés

Noemi González-Bellés

Licenciada en Psicología
Especializada en Ansiedad, Sexología Clínica y Terapia de Pareja

Col. CV-12338

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