Que te den por el culo. Sexo anal.

 

Cuando alguna vez te han dicho, “que te den por el culo”, suele nacer fruto de una discusión, y por lo general, hace referencia a una grata invitación hacia que ojala te pase algo bastante chungo.  No suele ir acompañada de besos, abrazos, risas y sonrisas. Repito, por lo general.

El sexo anal está considerado como una práctica de segundas, sino de terceras. Y es que es importante aclarar y remarcar que NO hay prácticas ni de segundas, ni de primeras, ni de terceras.

La sexualidad en la que nos desenvolvemos socialmente es totalmente coitocentrista, es decir, penetración pene-vagina, fin. Todo lo que se salga de ahí, es considerado erróneamente prácticas de segundas. Esto es debido a la idea arraigada judeo-cristiana del concepto de la sexualidad con un único fin reproductivo. Y claro, todo lo que no sea plantar una semillita, pues está mal. Es por este motivo por el que escucharás por ahí que es antinatural, que es una guarrada, y tal y cual.

Con esto más o menos claro, entonces  ¿Qué es el sexo anal? Pues son todas las prácticas relativas al ano, es decir, estimularlo ya sea con la boca (beso negro), con los dedos,  o a través de un arnés con un dildo o con el pene para llevar a cabo la penetración, entre otras.

Resulta irónico que a pesar de ser una práctica que está considerada generalmente tabú hablar de ella, es muy probable que te la hayan propuesto en algún momento de tu vida. No con un rotundo y firme “que te den por el culo”, sino más bien una tímida insinuación, “¿Oye, y si probamos por detrás?”

Sobre todo, si eres heterosexual puede que en algún momento tu pareja te haya querido persuadir para llevarla a cabo, si es que a ti no te hacia especial ilusión. Con la particularidad de que habrás vivido esta situación si eres mujer.  Y es que en los hombres heterosexuales  está extendida una FALSA creencia, rayando la obsesión, de que el placer anal y la orientación sexual están totalmente unidos. Así que si eres hombre, para reafirmar tu heterosexualidad, esta práctica solo la puedes hacer tú, no te la pueden hacer. Y es que el hecho de ser hombre homosexual, no implica que te guste la penetración anal. En las parejas homosexuales existe el papel activo/pasivo, siendo pasivo un termino no muy acertado, ya que no por el hecho de no ser penetrado es que «pases»  de la relación sexual. Todo papel es activo en el sexo.

Así que esta actitud «reafirmante» de orientación sexual resulta un poco absurda, ¿no?

CUEVA INTERIOR CONMIGO


Y es que el sexo anal es independiente de la orientación sexual. Se trata de una práctica que puede resultarte muy placentera, siempre que quieras probarla. 

 

El ano, es una parte del cuerpo con un gran número de terminaciones nerviosas, gozando así de una gran sensibilidad. En especial para los hombres, debido a que mediante la estimulación de la próstata a través de esta práctica, se pueden producir  orgasmos sin necesidad de tocar el pene. Para ello se pueden utilizar los dedos o los aneros. Estos son unos juguetes eróticos que se introducen en el ano y estimulan el perineo  mediante las contracciones de tu suelo pélvico, masajeando así la próstata.

Para que esta práctica sea lo más placentera posible, hay que realizarla con calma y sobre todo a tu ritmo. Si va a haber penetración, el lubricante es aconsejable que esté muy presente, así fluirá todo mejor. Si notas alguna molestia, es recomendable que pares. Si quieres seguir, lo mejor es que no lo saques y continúes despacito, ya que retomarlo luego costará más porque sin querer habrá más resistencia, como un acto reflejo. No tienes por qué introducirlo hasta el fondo, solo hasta donde te apetezca y te guste.

Se trata de disfrutar, hacer lo que tú quieras y hasta donde tú quieras sin necesidad de cumplir expectativas.

 

¡Un besito y que os den, por el culo!

Escrito por Bea. H

Graduada en Psicología. Especializada en Terapia de Parejas y Sexología

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9 Comments to Que te den por el culo. Sexo anal.

  1. Sandrita Colmena dice:

    Jejeje muy buen artículo!

  2. Arturo Casas dice:

    Oye, un aplauso Bea! Llevo mil años diciéndole a mis amigos (heterosexuales como yo) que que te laman el ano o te metan un dedito es de lo más placentero para un tío. Y los pobres infelices con la tontería de que por detrás no les entra ni un alfiler, pues no lo prueban.

    Creo que es por miedo a sentir placer y que se conviertan con ello en gays, o alguna super-tontería similar.

    También puede que lo hagan y lo disfruten y no digan nada a nadie por vergüenza.

    Más páginas como la vuestra harían falta para vencer esos miedos y que pudiésemos hablar con naturalidad.

    Oye, enhorabuena por el contenido y por ser tan directa. Me ha encantado.

  3. M.dolores dice:

    Muy interesante y educativo

  4. M.dolores dice:

    Muy interesante e instructivo

  5. SAMY OMEGA dice:

    orale no pss kien se apunta :v jajaja

  6. Ángel dice:

    Buenisimo. Creo que lo privare si mi pareja esta da acuerdo

  7. Anónimo dice:

    me parece un acierto esta pagina ¡¡

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